Los parásitos internos y externos pueden provocar enfermedades o servir como vehículo para la transmisión de estas a nuestras mascotas o a nosotros mismos (zoonosis). La desparasitación se encarga de prevenir y eliminar a los parásitos internos y externos causantes de estas enfermedades. Es recomendable desparasitar a tu mascota por lo menos dos veces al año de manera preventiva o en el momento que se presente una parasitosis.